Al menos tres hechos marcan lo que sería la conmemoración del 8 de marzo como el Día Internacional de las Mujeres, fecha que instaura Naciones Unidas en 1975. Todos relacionados con demandas laborales y condiciones de trabajo más justas. El primero de ellos, 8 de marzo de 1857, recuerda la huelga que inician las trabajadoras textiles en Nueva York que exigían mejores salarios y condiciones humanas de trabajo.